CÁMARA Y EDICIÓN: JULIO BRAVO.
Tras las apreturas en San Agustín y Echegaray, la verdadera dimensión del tirón de la Virgen del Rocío se apreció a partir de la plaza del Siglo, donde fue recibida con arroz y lanzamiento de cohetes.
En torno a la fachada decorada por los hermanos del Monte Calvario, la multitud congregada disfrutó de la sevillana cantada a la Virgen por Luz Muriana Saavedra y José Fernando Mendoza Real, tras la cual tuvo lugar una larga petalada.
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