CÁMARA Y EDICIÓN: JULIO BRAVO.
El 24 de marzo, en un ambiente de luto y recogimiento, el grupo parroquial de María Santísima en su Dulce Resignación y Esperanza procesionó por vez primera su imagen desde la parroquia de la Santísima Trinidad.
Medio centenar de nazarenos de riguroso negro, con capillos sin cartón precedían a la Dolorosa del siglo XVIII , de tamaño inferior al natural, que marchaba sobre trono de madera barnizada con peana de carrete, mientras un quinteto de metales se alternaba con un tambor ronco.
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